Todo comienza un 21 de mes, algo increíble que
llega sin que abras la puerta. Sin avisar, directamente te pilla por sorpresa
en un momento de tu vida que quieras o no, lo reconozcas o no, lo necesitabas.
Comienzas a conocer, comienzas a aprender, a sentir, a vivir nuevas
experiencias, comienzas a recordar lo que era el tacto de su piel y te das
cuenta que esa visita inesperada, ha llegado en el momento idóneo y no hace más
que ocupar espacio en tu mente, y cada vez más.
Que sí, que ya estas jodida. Es un
pensamiento que inconscientemente recorre tu mente cada instante. Y ya está.
Sucede. Ya estas perdida, has caído en la trampa que caen los valientes. Acabas
vendándote los ojos para no admitir lo evidente. En este momento vives en una
burbuja, haces oídos sordos a todo tipo de comentarios y solo ves lo que
quieres ver y aun sabiendo que te están utilizando, haces lo imposible para
coserte los ojos dejando a un lado la mente y apostando por el corazón. Te
dejas llevar de una manera tan profunda que te arriesgas a pasar de tenerlo
todo a perderlo por completo, pero eso a
ti te da igual porque estás en un mundo perfecto, en tu mundo perfecto, y no te
das cuenta que lo que estás haciendo es dejarte llevar a un mundo sin salida,
profundo y oscuro donde nadie ni nada podrá ayudarte a salir de ahí, estas
ciegamente enamorada.
Pero es que es todo tan bonito, te sientes
como en un cuento de hadas, lleno de magia e ilusión. Cuando te encuentras
junto a él sientes que te falta el aire, se te corta la respiración y tu
corazón no hace más que bombear a 100 por hora como si tuviera vida propia. Y hasta
cuando te enredas en él sientes su cuerpo recorriendo tu cuerpo con gran
intensidad con suavidad y aun sabiendo que arden las llamas bajo la sabana tú ni
siquiera te quemas, no aprecias el dolor, simplemente estás ida, tan ida que te
quemarías las veces que fueran necesarias con tal de volver a rozar su cuerpo
bajo esas sabanas de lino una vez más.
Es increíble como un día estas arriba, ahí en el país de las maravillas y otro día sin
saber el porqué, comienzan a aparecer nubes que cubren los claros cielos, y a
continuación se va oscureciendo el cielo y acabas con el chubasco de la
historia encima tuyo, sí, tu historia de amor. Comienzan los problemas, los “quiero más pero yo no”,
los “te necesito y no estas”, todo se va complicando las cosas van cambiando
sin tú quererlo y ves que aunque lo tengas al lado, le sientes cada vez más
lejos. Te conviertes en una completa ilusa. Te mata por dentro el saber que
para él no fue una historia especial y que ya no importa lo vivido, ya no importan los
recuerdos ni los momentos junto a él. Un día, llega, te dice que se va y se te
cae el mundo encima te conviertes en un mar de lágrimas y lo único que te queda
es la ilusión, pero esa ilusión es la perdición. Te atas a una ilusión
diciéndote una y otra vez “volverá” “me quiere” “le esperaré”
¡Que no! ¡Que haces mal! Que si una puerta se
cierra, te levantas y haces lo imposible para conseguir abrir una ventana. No vuelvas
atrás que lo que se va, se fue. Que con lo único que tienes que quedarte es con
esas experiencias vividas de manera que te ayuden aprender. Que tu príncipe azul
existe, claro que sí, y ten claro que esta historia de amor no ha tenido un
final feliz, este se quedó por el camino, convirtiéndose en rana demasiado
pronto. Pero te aseguro que tu príncipe azul
está ahí fuera esperándote. Pero tomate tu tiempo no te fuerces a olvidarlo todo
de un día para el otro, será duro claro que sí pero nadie dijo que esto del
amor fuese fácil. Y te obligo a que llores todo lo que puedas te obligo a
llorar una o dos noches enteras sin dormir pero también te obligo que al tercer
días cojas tus tacones y tu mejor vestido y que salgas a comerte el mundo. No
dependas de nadie, sal comete el mundo, conoce gente, vuelve a sentir el calor
del sol, que como dicen después de la tormenta viene la calma. Disfruta de ti
misma. Vive tu vida a tu manera pero promete que la vivirás que a peores
batallas han sobrevivido soldados.
Eres única, no te desaproveches, y comete el
mundo.
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Lo único que puedo decir es que realmente te das cuenta de cuanto
te ha importado una persona cuando la pierdes por completo. Llegue a tenerlo, y
en el momento idóneo, acabé perdiéndolo. Es increíble lo que una palabra como “amor”
puede llegar hacer, gracias a ella pasamos por miles de estados; de estar en el
éxtasis a estar empotradas contra la pared. Pero supongo que la vida es así y
que al igual que se fue, volverá. Y que como he dicho “,…comete el mundo” “eres
única”.
La
frase de hoy creo que acierta 100% con el tema del escrito, ya que en este
momento de mi vida pienso que si no me amo yo, no me amará nadie y no me podré dar cuenta de la realidad.
“Amate
a ti mismo lo suficiente como para darte cuenta de que cuando alguien no te
quiere, debes seguir adelante”.
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