24 de abril de 2015

Mi tren

Se acabó.
Lo acabó.
No quiere más.
No quiero más.
Pasa de mí.
Paso de él.
Se divierte.
Me divierto y me retuerzo por dentro.
No me necesita. No le necesito.
No me echa de menos.
No le echo de menos, mentira.
Se aburrió.
Me aburrió.
No me llegó a querer.
No le llegué a querer.
Era para él de momento, era para mí un proyecto.


Que paren el tren que yo me bajo aquí. Eso dije cuando le vi. Y ahora que se fue, se me retuercen las entrañas por haber dejado aquel tren. Ahora estoy perdida en medio de la nada sin saber dónde, ni cuándo volverá. Camino cientos de kilómetros para conseguir ver una luz, esa luz que vi irse sin remordimiento, esa luz que deje ir a la primera de cambio.

Y ahora es cuando me doy cuenta que ya es hora de pensar por mí y de dejar de tentar a la suerte por un simple capricho.

Coge el tren y no lo dejes escapar, porque te arriesgas a mucho, te arriesgas a terminar en medio de la nada con el corazón desgarrado y perdiendo la oportunidad de tu vida, ese tren que realmente te lleva donde deseas, sueñas y amas.

Prohibido bajarse del tren por un amor envenenado.

------

Vivan los impulsos.

Viva las ganas de probar.

Viva el arriesgarse.

Parecen contradictorias las tres frases, la verdad es que sí. Pero, ¿cómo sabremos si hacemos algo bien o mal, como sabremos si algo merecerá la pena o no, si no lo intentamos? Habrá que bajarse del tren de vez en cuando, ¿no? Qué sentido tiene la vida si no arriesgamos.

Pero eso sí, yo lo tengo claro, en temas del amor, cuidado, no seamos ilusos. Nada de esperar imposibles, nada de ponerse una venda en los ojos. Porque perder el tiempo en vano no tiene sentido, somos millones de personas en el mundo y hemos elegido a la media naranja desacertada, así que coge aire y empieza a correr, no pares, sigue. Desnúdate entera, renuévate, cambia de aires.

Que de esto se aprende, tenerlo claro, de esto se aprende pero mucho. Y no os preocupéis si volvéis a caer otra vez con la misma piedra, porque lo único que significará, es que te estás probando a ti misma y te estás preparando para coger fuerzas y para hacer el sprint de tu vida, dejandolo atrás por una vez.

“Hicimos el amor. Hicimos el amor en medio de la tristeza”
Charles Bukowsky



P.d. No pierdas el tiempo haciendo el amor en medio de la tristeza, con los ojos vendados y con tu propia tumba. Te obligo hacer el amor con tu amor correspondido.

La inusual Mapema

No hay comentarios:

Publicar un comentario